91
Duele admitir que siempre que hablo contigo acabo muriéndome un poco más, quisiera de una vez romper mis miedos, abandonar el silencio y decir por fin todo lo que siento, pero temo que voy a equivocarme, que terminaré malgastando mi amor, entregándoselo a quien muchas veces parezco no importarle.