128
Hasta que no creas verdaderamente en Dios, no serás testigo de su obra, deja por completo cualquier duda por mínima que sea, sácala de tu corazón, no dudes ni un solo momento de su existencia ni de su misericordia, sé paciente sigue orando, renueva cada día tu fe y tendrás la dicha de ver materializadas todas sus obras.