185
Te quiero, pero me niego a perseguirte. Mis sentimientos por ti son inmensos, pero el amor verdadero no implica luchar por la atención del otro, por eso me niego a seguir entregándote el corazón y que ocupes mis pensamientos. Ambos merecemos una relación en donde el amor fluya, donde haya un interés mutuo. Ya no puedo seguir obviando mi bienestar emocional por hacer sólo lo que tú quieras y que al final todo te de igual. Te quiero, pero también me quiero lo suficiente como para no perseguirte.