28
Tal vez no había nada que perdona sino algo que aprender. En ocasiones, las situaciones que te desafían no vienen a lastimarte, sino a enseñarte una lección valiosa, por eso analiza detenidamente, qué es lo que un amargo rato te puede estar enseñando. Qué hay detrás de la actitud del otro, qué lleva dentro que le ha hecho reaccionar así. Todos estamos librando batallas personales, así que sé paciente, practica la empatía y en lo posible procura ser consciente contigo tanto como con los demás.