38
Nunca seas prisionero de tu pasado. Fue una lección y no una sentencia de vida. Cada experiencia que viviste, por muy difícil que haya sido, fue una lección que te ayudó a construir esa persona que eres hoy. El pasado no te define, sólo brinda herramientas para que tomes mejores decisiones en tu presente y en el futuro. Los errores no son cadenas, así que libérate de cualquier atadura mental y confía en tu capacidad de mejorar y escribir una historia diferente.