No cambies tu forma de ser por hacer feliz a otro. Quien te quiere de verdad no te pide que te transformes, ni te exige que renuncies a tu esencia para encajar en sus expectativas. Cuando cambias para complacer a otros terminas por desaparecer, pierdes de vista lo que te llena el alma, tus objetivos y hasta tu criterio. No naciste para cumplir estándares ajenos, vive como quieras, piensa, actúa y disfruta según lo que deseas, sin apagarte que otros brillen desde su terquedad. Sé fie a ti, honra lo que eres y recuerda que quien te ame procurará ayudarte a ser mejor, pero nunca te pedirá que dejes de ser tú.

NO CAMBIES TU FORMA DE SER POR HACER FELIZ A OTRO
31