Mereces que te quieran bien y yo lo voy a hacer. No quiero hacerte promesas y no porque no piense en cumplirlas; es mi deseo demostrarte diariamente lo que siento y darte todo el amor que tienes merecido, ese que nadie ha sabido brindarte. Dame tu mano y confía en que siempre estaré a tu lado, quiero amarte, así como eres y por todo lo que quieres llegar a ser.