227
El que tiene fe en sí mismo no necesita que los demás crean en él. No depende de la aprobación o validación de otros para avanzar. Su confianza se convierte en un motor que le permite emprender caminos hacia nuevos desafíos sin importar las criticas o dudas a las que se puede enfrentar. La verdadera fuerza reside en tu interior y no se mide por reconocimientos ajenos, así que sigue adelante y confía en tus decisiones, porque al final sólo tú serás el directo responsable de las consecuencias malas y buenas que éstas tengan.