105
Sólo yo sé lo que siento, lo que callo y lo que hago. El resto que piense y diga lo que quiera. Únicamente yo tengo acceso a mi mundo interior y sé lo que siento, los demás pueden especular sobre mis motivaciones y deseos, las opiniones externas no dictan la verdad de mis emociones o la razón de mis acciones. Que hablen lo que quieran, no importa, nadie romperá mi tranquilidad.