248
Sanar siempre dependerá de ti, aunque no haya sido culpa tuya. Enfrenta tu dolor, aprende de él y permítete crecer a partir de la experiencia. Aunque no hayas sido directamente responsable de las causas, tienes el poder de decidir como responder ante ellas, como aliviar tu sufrimiento y aunque pueda ser un proceso difícil, tu amor propio y valentía aumentarán considerablemente. No se trata de olvidar, sino de hallar la manera de aliviarte y de que sigas adelante.