40
Abril fue un mes de siembra, que mayo traiga la cosecha de lo que tanto hemos trabajado. Nos hemos esforzado y tomado decisiones que tal vez no fueron sencillas, pero sí necesarias. Fue un tiempo para preparar el terreno, para confiar en los procesos y seguir nutriendo sus raíces. Despidamos a abril agradecidos y confiemos en que florezca todo lo que sembramos con amor paciencia y convicción, porque todo lo que se cultiva con fe, siempre termina dando buenos frutos.