Las cosas maravillosas no están a la vuelta de la esquina, no hay atajos para llegar a los lugares que de verdad valen la pena, así que si el camino se pone complicado no te desanimes, porque vas por el sendero correcto, las caídas nos enseñan y cuando llegas al objetivo por el cual tanto has luchado valoraras cada esfuerzo hecho de tu parte y disfrutarás de una manera indescriptible ese momento de tu vida.