221
El miedo existe para que seamos prudentes, pero no dejemos que influya sobre absolutamente todo en nuestra vida. Esa emoción natural nos protege e impulsa a actuar desde la prudencia cuando es necesario, pero no dejemos que controle cada aspecto de nuestra existencia; es importante atenderlo para tener la posibilidad de reflexionar, manteniéndolo en equilibrio, para que no paralice por completo el buen ritmo que nos lleva hacia nuestros objetivos.