Cada quien cuida lo que de verdad le interesa y descuida lo que en últimas le estorba, le resta importancia a eso que siente que poco aporta en su vida, pero que después no vengan las lamentaciones ni los arrepentimientos por haberlo hecho, el ser humano valora más lo que ha perdido, aquello que escapó de sus manos por descuido, así que valora siempre todo aquello que se halle contigo.