Ámate a ti mismo primero, si tienes la capacidad de amar, porque eres tú quien conduce tu vida, quien domina su propio espacio y si sientes amor por quien eres y por lo que haces, no hay palabra o acontecimiento que detenga tu marcha, quiérete y valórate, sé consciente de tus cualidades, no dejes de creer en ti, alimenta tu espíritu, si te amas llegarás muy lejos y tendrás el doble de amor para dar.