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Si sientes que lo estás perdiendo todo, recuerda que los árboles pierden sus hojas cada año, pero siguen erguidos y esperan que lleguen días mejores. Perseveran con firmeza y confianza, porque eventualmente todo mejorará, es una gran lección la que nos enseñan los árboles, así que también podemos superar nuestros momentos difíciles para crecer y renovarnos en el proceso. Mantén viva la esperanza, la fortaleza y la determinación, incluso en los momentos más oscuros, porque tú también podrás emerger más fuerte, floreciendo en el buen tiempo que viene.