13
No dejé de marte, pero un día tus actitudes me dieron razones para soltarte. No fue por falta de amor, fue exceso de heridas, no quiero seguir sintiéndome así, quizás digas tus palabras y tomes tus acciones desde una buena voluntad, pero no quiero que sigas en esos lugares a los que te has llevado por mí. Me ha quedado claro que has reducido tus expectativas conmigo y yo también lo lamento; prefiero que no sigamos así. Espero que goces de esa libertad que tanto amas y de la cuál sólo fui una de tus tantas compañías.