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El dolor que sientes ahora, te dará las fuerzas para enfrentar el mañana. Las dificultades que se presentan ahora no son permanentes, pero las lecciones que te dejarán serán un aporte valioso para el futuro que vivirás. Cada lágrima, y toda esa tristeza que te embarga, abrirá paso a tu crecimiento porque es en las situaciones más adversas donde descubrirás nuevas habilidades, mejorando las ya existentes. Este momento no define quien eres, es sólo una parte del proceso que conlleva a tu crecimiento.