Definitivamente, distancias honestas valen más que cercanías hipócritas. Se valora más a quien con sinceridad se aparta, que a quien se queda a tu lado para hablar mal de ti a tus espaldas o incluso desmeritar tus logros. No te quedes al lado de esos ladrones de energía, ni de la gente con doble moral, si ellos no se apartan, sé tú quien con sinceridad se aleje.