¡Sé feliz! Empieza por arrancar de tu mente barrotes que te impiden desarrollar libremente tus pensamientos, extiende tu alma sobre el mundo y aprecia cada maravilla que veas, no te cohíbas a la hora de expresar tus sentimientos e inconformidades, tienes derecho a opinar y a ser como tú quieras, mientras no implique pasar por encima de los demás, exprésate con absoluta libertad.