Suelta lo que no puedes controlar y hallarás tranquilidad. Deja de darle vueltas a un tema que no puedes solucionar, admítelo de una vez y sigue adelante, no sigas perdiendo el tiempo ni tus fuerzas, suelta aquello que te deja sin aliento y toma un nuevo rumbo, piensa en ti, es tiempo de continuar hacia lo que de verdad te beneficie y puedas manejar.