315
¡Buenos días! Que satisfactorio es despertarse dando gracias a Dios por escuchar la voz de nuestras almas y por todas esas hermosas bendiciones que nos brinda diariamente. Ha cuidado nuestros sueños y nos ha permitido tener un feliz descanso para que hoy sigamos con paso firme hacia lo que tanto anhelamos; es un gran privilegio que Dios nos cuide, escuche y proteja.