18
Con cien mil defectos, pero no conocerás un corazón como el mío. Uno que a pesar de las caídas sigue creyendo en lo bueno, un corazón que se entrega sin medida, que perdona y no guarda ni el más mínimo rencor y que aún con cicatrices, sigue amando con ternura, sin esperar nada a cambio. Me es imposible alcanzar la perfección a la que aspiras, pero sé que soy una persona autentica, sincera, fiel que es capaz de sentir intensamente, cosa que muy pocos entienden. Yo busco impresionar, sólo ser real.